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Donde la locura alcanza su sentido

El Atlético anima la Liga

El Atlético anima la Liga

El interés que la liga podía deparar tuvo ayer una muestra de que las 15 jornadas que restan serán emocionantes, apasionantes y extramadamente competitivas. Hay liga. Y la hay, ya no sólo por ese valor estadístico fundamental e irrefutable que dice que en tres jornadas, el Real Madrid ha recortado ocho puntos a su predecesor. Hay liga, porque el Barcelona ha entrado en una espiral vertiginosa de la nada. Acosado por un equipo blanco que ha sabido adaptar su juego a su discurso, los blaugrana parecen haber optado por ese caída libre psicológica y deportiva increíble hace tan sólo un mes.

Porque si hay algo que diferencia a blancos y azulgranas en situaciones extremas es la fortaleza psicológica de la que unos presumen, y otros adolecen. De un lado, el Madrid, con sus diez victorias consecutivas ha logrado fortalecer una moral minada con el desastre institucional iniciado hace dos meses. Entonces, nadie abogaba por estar tan cerca del todavía líder. A los blancos no les hace falta un gran juego para llevarse los partidos con la facilidad que hasta ahora han demostrado. Dejando de lado la prosa heróica de hace dos años, ahora plantea los partidos con una tranquilidad de quien se sabe ganador, de quien conoce la inercia positiva y de quien, con un perfil bajo, reconoce que su momento puede llegar pronto. El sábado ante el Espanyol volvió a demostrar que con poco es capaz de desmontar a su rival. En concreto, sólo tuvo que modificar un esquema partido en dos, por otro tiznado de rigidez. Entonces, el anclaje en centro del campo de Lass, apoyado por la salida del balón de Raúl, fue suficiente para atizar con dos paletas la inoperancia espanyolista. Así, y con brillante excepción de los encuentros ante Betis y Sporting, el Madrid ha logrado treinta puntos consecutivos y ha demostrado que sabe adaptar sus necesidades a las muchas virtudes de las que es capaz.

Del otro el Barcelona. El fútbol de seda por excelencia que de forma inexplicable ha caído en la tentativa del miedo. El Barcelona, a diferencia del Madrid, no sabe ganar sin el preciosismo que siempre necesita demostrar. Y eso le afecta negativamente en el trascurso de unas jornadas donde su rival recorta puntos como antaño los blaugranas goleaban. El Barcelona siempre ha avanzado con el juego y la psicología como alfa y omega de su existencia. Como una relación directa, borrando uno de estos elementos, el otro también se ve afectado. Y la traducción clasificatoria está bien clara: ocho puntos menos en tres jornadas. El encuentro de ayer ante el Atlético es una buena muestra de la situación en la que los azulgranas se encuentran. Han perdido la conjunción entre líneas. Eso demustra que el centro del campo, su gran referencia a la hora de romper los encuentros a su favor, ya no encuentra el viento. Ayer el Barcelona se dejó contagiar por una carrusel de goles y emociones en el que el Atlético de Madrid se mueve mejor que nadie. Pareció pactar con los rojiblancos un antiacademismo del que salieron impunes los de Abel. ¿La razón? Esa que los rivales van entendiendo a la perfección: ahogo en el centro del campo, presión insuflante a la defensa blaugrana y una falta de frescura que denota que estamos en marzo. Si a un equipo que respira a través del balón, le azotas con la mirada enfrentada, parece no reaccionar ante la ingobernabilidad que ultimamente ha demostrado. Peligrosa tendencia para afrontar tres competiciones en tres meses.

Ante ello, ya nadie duda de que hay liga. El Madrid, aunque callado ante el devenir de nervios ajenos, sabe perfectamente que su momento ha llegado. Después de estar desauciado deportivamente hace apenas semanas, los blancos han recuperado un espíritu que nunca han dejado de demostrar. Hace dos temporadas, apelaron al romanticismo de ese club. Ahora apelan a la serenidad y la tranquilidad. Características que parece haber perdido el Barcelona. Ese club que parecía el más cuerdo de los cuerdos. Hasta hace tres jornadas. Hoy, con ocho puntos menos, la locura parece haberle arrebatado la verticalidad. Tan necesaria en su juego, y en su estado anímico.

2 comentarios

Dalay -

A ver si esta jornada tb tirais de heroica y ganais al madrid, que mucho jodeis al barça pero luego bien que se os cierra el culo con el vecino

Daniel -

1- Magnífica crónica en estilo, no en contenido.
2- El barça está líder, tiene encarrilado el paso a cuartos de la champions y está prácticamente en la finald e Copa.
3- Preocupate del atlético que es capaz de ganar al Ba´ça y perderá la jornada próxima contra cualquier equipo ramplón.
4- mañana te cojo y te curto a hostias.
5.Deja de ensalzar a la mierda del Madrid, o de lo contrario: Muérete, por favor.